viernes, septiembre 28, 2007

¿Supiste Cicciolino...?


Hoy Viernes supimos Cicciolino...vas a tener un tío!
Un tío más pequeñito que tú...es como raro no?
Un tío pequeñito para que crezca contigo, para que juegue contigo, para armar soles juntos y llenarnos la vida como hace tanto.
Costó Cicciolino, costó decidirse a que viniera al mundo, costó varios años soñarlo y pedirlo, desearlo y discutirlo y cuando me avisaron de tu llegada lo cierto es que lo primero que pensé fue: "Ya no vendrá".
Pero el tiempo se encarga de encaminarnos, de abrirnos de nuevo los ojos y el corazón, de acomodarnos los tarros que se han caído de la estantería y decirnos: "Adelante"... no puede ser malo.
Y me río pequeño mío, me río en la consigna de tus ojitos mirándome el día en que te reciba en brazos, tú con tu sonrisa de cielo, yo con mi barriga grandota en espera de un Junio cercano.
Sonrío en el sueño de tus manitos de algodón enrollándose en mis dedos y de tu olorcito de pastel de choclo.
Un bebé nuevo Cicciolino, un bebé mío, un bebé tan amado como amado es mi Cicciolino.
Pero sabes? (y esto que quede entre tú y yo) tú y yo seguiremos siendo cómplices, amigotes, porque tienes mi corazón desde antes, desde siempre... mi pequeño y dulce Cicciolino.

miércoles, septiembre 12, 2007

¡¡¡ Yo Sabía !!!! Un Cicciolino !!!


Esta ha de ser la Segunda Carta de Navegación de nuestro viaje.

Cicciolino... eres un niño...un niño..y yo lo sabía.
Y ahí estás, entre la imagen difusa de tu perfil clarito clarito...
Has de saber que soy una bruta, así, en todas sus letras, que no se de trenzas ni vestiditos rosas, que me he guardado mil historias de hadas para no sé qué princesas escondidas en no sé que rincones de mi nostalgia o de mis futuros...

Qué no sé de tardes en sillitas pequeñas disfrutando de un té imaginario entre muñecas ni gatitos, no sé Cicciolino, no sé peinar con cintas, ni enseñar a tejer o a bordar entre tules y bailarinas.
Así que como nada de eso sé es que me siento tan feliz.
Pero de lo que si sé... de eso te voy a contar.¿Vuelas conmigo?

Pues mira, yo soy de las otras, de esas que prefieren andar saltando entre las ramas de los árboles para escribir poesía más cerca del cielo hasta esperar la noche.
Soy de las que ha enseñado con amor y disciplina militar, de las que ha batallado a combitos o jugado a los soldados, a las batallas, a la pelota, la que ha forjado guerreros para la vida.

Pues seremos secuaces entonces, los mejores, claro está, pero no le vayas a contar esto a nadie.
No contarás que nos escaparemos a caminar con pies de forajidos para trepar montañas escarpadas y convocar a los monstruos de los que nos reíremos hasta que nos duela la guata.

No contaremos nada de eso, seremos dos duendecillos inventores y deslenguados (tampoco digas que soy muy buena para decir palabrotas) seremos cavernarios a veces, vociferantes destructores de empalizadas, compañeros de relumbrantes armaduras en las mil historias que puedo tejerte hasta la luminosa faena del verso.

Tiraremos una moneda a la estrella de la suerte para seguir azules entre las nubes y contemplar a los cuatro vientos solo flores y campos de flores hasta la colina de las amapolas desde donde nos dejaremos caer como dos duendes despavoridos, huiremos de las reglas, nos esconderemos en una fábrica de chocolates entre negritas y alfajores y nos matricularemos en la escuela de canto de pájaros poseedores de toda la magia y la belleza.

Cuento contigo en el afecto de las manos como cómplice de las más dulces fechorías con pompitas de jabón y bigotes de leche con plátano, cuento contigo en la travesía de remover las hojas de los árboles, en los viajes al infinito coronados de aves migratorias, cuento con tu manito de cielo hasta tumbarnos de agotamiento en la orilla del mar para que el viento nos hable con su voz de plata, las nubes nos traigan todos los sueños y el respirar abra todas las puertas invisibles hacia los reinos de las apacibles colinas.

Y seremos indios, piratas, guerreros, capitanes, soldados, poetas de la buena siembra, locos inventores, compañeros de letras que mirarán a los ángeles desfilar y nunca, nadie lo sabrá jamás.

martes, agosto 07, 2007

Cicciolino de Lana


Me acuerdo que cuando era chica de un canasto lleno de ovillitos de todos colores que tenía mi abuelita sacaba lana para aprender recién el bonito arte de hacer ropa con las propias manos.
Hace tiempo que no tejo, hace tiempo, muchos años, desde que le hacía ropa a mis muñecas que no tomaba los palillos.
Hoy salía caminar Cicciolino por las calles de esta ciudad para escoger las madejas del primer chalequito que te voy a tejer y los ojos me brillan y el corazón da saltos de alegría.

Miré muchas vitrinas repletas de madejas de lana de todos los colores y al fin he comprado 3:
Dos celestes y una verde.
Y con esas madejas voy a hacerte un chalequito.
Será el primer chalequito que te voy a hacer.
Le pondré dos bolsillos para que guardes tesoritos, piedras de colores, botones, rueditas de auto, pétalos de flor.
Lo escogí verde para que te puedas tirar al pasto y aunque quedes todo revolcado no se te noten las manchas.

Será un chalequito hermoso, tan lindo como el que le hacía a mis muñecas, incluso va a ser más lindo porque no será un chalequito de juguete y aunque sea muy pequeño, tan pequeño como tú, será un chalequito de verdad.
Un chalequito de lana para ti, pequeño sol, repleto de cariño, con rayitas verdes y celestes y 6 botones con una carita sonriente.

lunes, julio 09, 2007

Te Conozco

Mira como son las cosas.
El Viernes 8 de Junio te pudimos ver por primera vez.
El Bastita llegó con los ojos brillantes de emoción y me dijo:
"Oh mamá me pasó algo súper extraño... lo encontré igualito a mi"
Y me dio risa, risa y emoción.
¿Qué habrá podido ver en esa imagen tan pequeñita en la que pudo reconocerse?
"Mide 6 cms", 6 cms. me dijo e hizo el gesto con los dedos.
Y ahí estabas, con apenas un mes de vida y con todas tus partes humanas, tus partes latiendo, tus partes en movimiento, tu cabeza redondota y la espalda grande, grande de Cicciolino fuerte.
Algo me dice que serás un niño.
Son como presentimientos del alma.
Porque si fueras una niña el corazón se me derretiría entero, así como cuando se quedan los bombones de chocolate bajo el sol.
Pero creo que serás un niño y tanto lo creo que te he llamado Cicciolino, mi Cicciolino.
Y te veo y te saludo en reverencia, tal como se le saluda a un rey o a un príncipe cuando le conocemos.
¿Usted es mi príncipe lo sabía?
Pues le saludo entonces, Bienvenido a este mundo, para mí, es un gusto conocerle... Majestad.

martes, junio 19, 2007

Cuando la tierra paró de girar



Será ésta la primera carta de navegación de nuestro viaje.

Voy a contarte cuentos de barcos, de océanos inmensos con naves cargadas de maravillas, de esas maravillas que aún no he podido contarle a nadie, ya sabes, vivir entre tantos ingenieros, números y planes puede ser una de las cosas mas emocionantes del universo, pero a la hora de embarcarse les cuesta un poquito mirar las estrellas como yo pienso enseñártelas.

Voy a mostrarte como se embalan caricias de luna con poemas nuevos y viejos, ésto me lo enseñó un viejo amigo que por estos días transita conmigo en navíos sin tiempo cargados de letras, tiene el pelo revuelto y le gusta bailar al son de las gaitas en el viejo continente...

Voy a contarte la historia de mis hadas, esas que nunca he contado a nadie (porque en estos tiempos nadie cree mucho, ya sabes) y te enseñaré la forma en que puedes verlas y hasta tocarlas sin que nadie pueda saberlo.

Voy a enseñarte a volar en la forma en que he aprendido a hacerlo, así, entre nubes de conejos y adivinanzas de animales, a volar sintiendo que se vuela y aterrizar como los pájaros cuando bajan a remover las hojas de los árboles.

Recorreremos de la mano el barrio para charlar con el vagabundo, la señora de las flores, el viejo de la pescadería, los presurosos pasajeros de tabernas, los gatos de la plaza, y verás que en la sencillez de lo cotidiano se funda la magia.

Hablaremos de libros, del aire, de duendes, del misterio de la lluvia y los relámpagos, el poder de la música y los arpegios para enseñarte a amar las artes, las danzas, los besos perdidos en una butaca de cine antiguo, y la belleza de las letras en el acto simple de transcribir el alma.

Nos hundiremos en tortas de lúcumas, comeremos caramelos en las plazas en los frescos de la media tarde, morderemos peras en almíbar, me lanzarás naranjas al pecho y nos torceremos las orejas cuando comamos tallarines para tragarlos más rápido, soñaremos con gallinas preparadas en calderos, tocinos perfumados, cestas de pan oloroso y lameremos el plato del puré hasta morirnos de la risa.

Te contaré de los misterios de Dios contados y cantados en siglos de inefables maravillas.
Y sabrás que aún en sus misterios la vida es variopinta, hermosa, con caminos tan locos como mágicos y que vale la pena vivirla.

Te llevaré de tu cuna a la luna y así olvidaré (angelito de mi alma) el día en que por un segundo en el eterno vértigo de mis días la tierra paró de girar.

miércoles, mayo 23, 2007

Tu Papito: Bastián



Nació un Lunes de Abril así sin anestesia y a la velocidad de la luz, hacía frío ese día y apenas llegué caminando al Hospital San Juan de Dios del brazo del Nano y de papá.
Me lo entregaron a las pocas horas envuelto en pañales y con la cara toda rosadita y luminosa..."Es tan lindo" fue lo primero que pensé.
Y era lindo, lindo de verdad y muy diferente a su hermanito mayor, el Bachi.
Mi Bastita es el brillo de mi alma, la alegría de mi corazón, pequeño y marabunta siempre ha sido el palomilla, el que chupaba los charquitos de agua de lluvia o de la ropa recién tendida, el que le echaba la culpa a la polera del "Tomatito asesino" cuando se mandaba alguna embarrada o al "Pescadito" cuando se mojaba entero.
Mi Bastita, mi bebé, mi bebé por 17 años... por estos días me pregunto si seguirá siéndolo por siempre.
Sol de mis días y de mi corazón, mi blanquito, mi tortita de mantequita... te lo muestro hoy día tal cual es la imagen que sale de mi corazón.